Morpheus
La nieve espacial del azúcar derramada, el sueño que se expande y todo lo rodea.
Y te busca, en su sueño, dormida, y te encuentra, te acaricia, te rodea. Se duerme a tu lado, sosteniendo tu mano, con inocente majestad, elegida por sobre el deseo, sabedor de tu inocencia y de lo suave del amor.
Tus ojos violetas se abren, tu mente se despierta y el sueño del platónico amante se esfuma, dejándote, perpleja, la sensación de que aún se queda ahí.
Y entonces el dolor te rodea, y te abraza, por que él estaba y no estaba allí. Y la lágrima baja, estrepitosa en su silencio, y rueda en el espacio nevado del mañana.
Y te busca, en su sueño, dormida, y te encuentra, te acaricia, te rodea. Se duerme a tu lado, sosteniendo tu mano, con inocente majestad, elegida por sobre el deseo, sabedor de tu inocencia y de lo suave del amor.
Tus ojos violetas se abren, tu mente se despierta y el sueño del platónico amante se esfuma, dejándote, perpleja, la sensación de que aún se queda ahí.
Y entonces el dolor te rodea, y te abraza, por que él estaba y no estaba allí. Y la lágrima baja, estrepitosa en su silencio, y rueda en el espacio nevado del mañana.
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